Bodegas Dehesa del Carrascal

Durante la pasada feria de Albacete pudimos degustar algunos de los vinos de esta bodega almanseña cuyos vinos Tudon´s y Dulcemar han obtenido diversos premios por su saber hacer y calidad.
 En sus vinos se refleja el clima continental con claras influencias mediterráneas propio de la zona de Almansa, sus viñedos están ubicados a unos 1000m. en su mayoría de garnacha tintorera, la uva más representativa de la zona aunque también existen parcelas de otras variedades como syrah, cabernet sauvignon y petit verdot.
 Poder probar sus vinos a precio de bodega en un entorno sin igual como el circulo central del recinto ferial albaceteño junto al  templete, nos permitió en diversas ocasiones maridar dichos vinos con ricos embutidos que venden en los alrededores así como su particular vino dulce con los archiconocidos miguelitos de la roda.
 Los vinos catados fueron:

 Gran tudons garnacha tintorera 2009: Vino joven, con buena carga frutal en un punto de madurez correcto, con un toque cítrico propio de la variedad (cáscara de naranja) y un leve punto especiado. Tactilmente mostró una tanicidad presente pero no molesta que le aporta consistencia a su final de media duración haciendo de este vino un buen representante varietal.

 Tudons cabernet sauvignon reserva privada 2005: Se muestra seco, serio, con aromas de café sin tostar, ciruela y un toque vegetal, menos “confitado” que sus hermanos posee en boca un agradable frescor, buen paso y estructura siendo su cuerpo algo ligero facilitando su paso por boca.


 Tudons syrah reserva privada 2005: Sin llegar a la complejidad aromática de otras elaboraciones con esta uva el vino deja ver fruta madura como higo, con un puntito floral característico. En boca el amargor típico también aparece sin molestar, es mas goloso que sus hermanos de las variedades syrah y petit verdot con toques de regaliz y buen peso en boca, su final medio-largo es de grato recuerdo.
 

 Tudons petit verdot reserva privada 2006: Excelente trabajo con esta variedad que aporta frescor en forma de aromas verdes y balsámicos a la ya conocida madurez y golosidad de los vinos de la zona debido a sus condiciones climatológicas. Fácil y resultón en boca, refresca al pasar y además deja notas de complejidad agradables.
 

 Dulcemar 2009: Festival de mermelada de moras y frutillos negros para un vino con garra que ojo, puede llegar a saturar por su dulzor si se toman varias copas, acompaña a las mil maravillas tartas de queso y otros postres complejos sin perder la personalidad de un muy buen vino dulce. La garnacha tintorera en plena esencia. Fruta negra, regaliz, cuerpo y estructura para este vino que ha sido fermentado parcialmente en barricas de roble francés.
       
 La bodega elabora además un vino rosado con la variedad syrah que habiendo probado elaboraciones similares en la zona puede ser una buena apuesta en las épocas del año donde los rosados muestran su esplendor, antes de los rigores del verano.

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