El patio de Samuel Cano

Tomando un café y charlando con Joaquín Tomás Velasco de mil y una historias entorno al vino y su cultura en la barra de un mesón donde cuesta encontrar los vinos que se ofrecen muy al contrario que los destilados que presiden una inmensa barra nos resulta especialmente sangrante en una riquísima zona vitivinícola como resulta Mota del Cuervo, para más INRI mesón El Quijote llamado, luego nos confesaron que los vinos están a “buen recaudo” con una amplia oferta lejos de ojos ajenos, vamos como lo del tío y “graná”…en fin luego nos rasgamos las vestiduras… pues en estas esperamos a Samuel Cano que pronto aparece con su frac de vigneron como no podía ser de otra manera para mostrarnos la magia de su patio, esta magia no se esconde entre paredes o galerías junto a las casas como indica la definición de la RAE de la palabra PATIO sino a pie de campo, entre viñedos preciosos y antiquísimos de la variedad Airén o entre las jóvenes cepas de Graciano, Petit Verdot y Syrah.

Entre gredas y suelos arcillo calcáreos de distintas características, unas con algo de arena, mayor o menor cercanía a la roca madre y distintos grados de dureza especialmente de la parte calcárea del mismo Samuel nos revela su preocupación por recuperar la verticalidad casi perdida del paisaje factor que bien conoce repercutirá beneficiosamente al ecosistema de la zona y por ende a sus personalísimos vinos. Distintos tipos de podas como el doble cordón royat de 4 pulgares según la experiencia atesorada en variedades de brotación tardía y ciclo largo favorecen la idea de vino que Samuel tiene en mente y consigue año tras año con excelentes resultados, vinos naturales, nacidos del respeto al entorno y que respetan las características de franqueza que buscamos en la copa.

 
Microvinificaciones de las parcelas más atractivas como “La Longuera” o “La Tarancona” en el caso de la airén, viñedos muy viejos en originalmente en vaso que fueron reconvertidos a espaldera, que es vendimiada en un estado de maduración avanzado, ya metidos en octubre-noviembre son el punto de partida para la airén mas expresiva del mercado donde se busca reflejar el terruño como así sucede año tras año, por ejemplo en la añada 2010, atención con 2 años en barrica junto con sus hollejos, encontramos fruta escarchada, amielados, flores secas, recuerdo a velo en flor jerezano, membrillo y un marcadísimo carácter mineral en forma de tiza y talco. En boca tiene volumen aportado por un tanino sorprendente que resulta poco habitual en vinos blancos y es que este vino de habitual tiene entre poco y nada, si te atrapa te apasiona como ha hecho con nosotros pero reconocemos que resulta un vino complicado para el público general al que poco a poco va atrayendo a su terreno por su terrible personalidad y expresividad.

 
De las muestras de deposito catadas de  la añada 2012 destacamos la floralidad de la Syrah complementada por toques leñosos maduros e interesantes, de la Petit verdot catamos dos versiones de distintos tiempos de maceración, la que todavía estaba en contacto con los hollejos resulto sumamente atractiva por su expresividad y nobleza, esta será utilizada según nos confeso Samuel para su Patio Selección 2012, el más alto de gama de las referencias que elabora. De la graciano una fruta algo acompotada de grano muy pequeño, una acidez elevada y ese tanino algo rugoso característico nos habla de la veracidad varietal del vino obtenido.


De las muestras catadas de barrica el Petit Verdot 2011 destacaba por su marcado ataque y dulzor en boca que recordaba a frutilla roja y a chupa chups kojak, la syrah por ese carácter de frutería, naranja sanguina, leve toque oxidativo que lo hace atractivo y unas notas muy nítidas a clavo de olor. La graciano resulto muy amable, fresca pero sin el toque acido marcado que suele ofrecer la variedad, mucha frutilla roja y negra y toque lácteos. Patio ensamblaje 2011 compuesto por las 3 variedades anteriores con un 60% de syrah, 25% de Petit Verdot y 15% de graciano aunó las virtudes de los anteriores formando primero una nariz compleja con fruta en buen grado de maduración y atractiva notas balsámicas y mentoladas mientras que en boca se mostró amplio con una acidez apropiada, tanino amable y un amargor final que aporta longitud al conjunto.

 
Además de todo esto tuvimos la oportunidad de catar su nuevo Patio dulce, graciano 2011ya que en la añada 2010 fue elaborado con la variedad syrah, este dulce de graciano recordaba a la mermelada de arandanos, higos secos, toques anisados, carácter mineral, recuerda a un vermouth y algo ahumado con ciertas reminiscencias a un PX sureño. También en este corte de vinos dulces probamos algunas de las “inquietudes” del bueno de Samuel como un Airén de 2011 con adicción de mosto de la añada 2012 con un marcado perfil auvado como no podía ser de otra manera o un vino al estilo "ripasso" de la Valpolicella que consiste en el ensamblaje de la añada 2011 antes comentado reposado durante algunos meses en las barricas utilizadas para el vino dulce de graciano 2011 con sus lias finas.

En definitiva una gran sesión de cata y aprendizaje junto a una persona que una vez leí se definía como un campesino enamorado, vinos naturales de hombres sin artificios.


Datos de contacto:

Director comercial: Samuel Cano Zarco (....y viticultor....y vendimiador...y enólogo...y embotellador...y distribuidor...y buena gente)
Teléfono: 666 012 558
Mail: samuel_cano@yahoo.es

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